LA REAPERTURA DE UNA POLÉMICA

Los valencianos llevábamos años sin tener grandes discusiones sobre la denominación de nuestra tierra. Las principales preocupaciones de políticos, sindicatos, asociaciones y ciudadanos en general eran otras: corrupción, paro, recortes… Sin embargo, el pasado mes de mayo el Partido Popular de la Comunidad Valenciana (PPCV) reabrió este incómodo e inútil debate aprobando en las Cortes Valencianas una proposición no de ley que tiene como principal medida la prohibición expresa de utilizar la denominación País Valenciano en cualquier escrito oficial.

pv-188x300

La coalición valencianista Compromís, por su lado, intentó enmendar dicha proposición para que se admitiera la libre denominación de la Comunidad como Reino de Valencia, País Valenciano o Comunidad Valenciana, que por supuesto, fue rechazada con los votos del PPCV.

Esta reapertura de la batalla de nombres es vista por miles de valencianos como el último intento desesperado del PPCV por desviar la atención de los graves problemas que el actual equipo de gobierno popular es incapaz de hacer frente, como el alto desempleo, la inexistencia de nuevas inversiones públicas, la gigantesca deuda de la Generalitat Valenciana, los recortes en servicios básicos o la rampante corrupción.

De hecho, esta inesperada e innecesaria proposición no de ley pilló a casi todo el mundo por sorpresa. El nombre de País Valenciano no sólo está presente en avenidas, plazas y calles de cientos de pueblos y ciudades, sino que además es usado por partidos políticos – Partit Socialista del País Valencia PSPV– PSOE, Esquerra Unida del País Valencià, Els Verds del País Valencià, Esquerra Republicana del País Valencià -, casi todos los sindicatos – CCOO-PV, UGT-PV, Sindicat de Treballadors de l’Ensenyament del País Valencià – o diversas asociaciones – Acció Cultural del País Valencià- . Por tanto, esta prohibición, además de superflua, adquiere tintes de surrealismo al pretender prohibir a buena parte de la sociedad valenciana llamar a su tierra utilizando una denominación con un arraigo importante.

EL TÉRMINO “PAÍS VALENCIANO”

El término País Valenciano aparece documentado por primera vez en el libro “Vida de Fray Agustín Antonio Pascual”, del fraile Agustín Bella, cuando en un pasaje dice “… no le tenía el Señor destinado para apóstol de las Indias, sino de nuestro País Valenciano…“.

Por otro lado, el historiador y filólogo valenciano Manuel Sanchis Guarner recopiló algunos pasajes de obras satíricas populares de mediados del siglo XVIII donde los autores también se refieren a las tierras valencianas como País Valenciano.

Sin embargo, no fue hasta principios del siglo XX cuando el nombre de País Valenciano se convirtió en el habitual entre el movimiento obrero y el valencianismo político, en parte debido a lo anacrónico de seguir usando el nombre de Reino de Valencia, que había sido disuelto y dividido en provincias hacía casi 200 años. De hecho, el movimiento de las Juventudes Valencianistas publicaron en 1906 un mapa de las comarcas valencianas usando dicho término. En la década de los años 30, con el advenimiento de la II República, el término se extiende entre la población y aparece usado en decenas de publicaciones de carácter académico, cultural y político. Numerosas instituciones empezaron a usar este nombre de forma habitual, como el Consejo Provincial de Valencia. Los partidos políticos lo usan en sus carteles y además es el nombre elegido en la mayoría de proyectos de Estatuto de Autonomía presentados, que como sabemos nunca llegaron a aprobarse debido al golpe de Estado de 1936.

Tras décadas de opresión franquista no fue hasta los primeros signos de apertura del régimen en los años 60 cuando el escritor valenciano Joan Fuster escribió el apartado “País Valenciano” de la serie “Guías de España”.  A partir de aquí, el término empezó de nuevo a ser ampliamente utilizado por la mayoría de la sociedad valenciana y por casi todos los medios de comunicación tanto antes como después de la transición, sin que la censura franquista objetara gran cosa.

Tras la muerte del dictador y la llegada de la transición democrática, la Asamblea de Parlamentarios del País Valenciano propuso que este fuera el nombre oficial de la autonomía en el conocido como Estatut de Benicàssim, pactado el 25 de octubre de 1979. La mayoría aplastante de partidos políticos lo firmaron, incluyendo la Unión de Centro Democrático (UCD). De hecho, la institución preautonómica creada tenía el nombre de Consell Preautonòmic del País Valencià.

El ORIGEN DE LA POLÉMICA

Sin embargo, el anticatalanismo creciente en diversos sectores y el hecho de que los últimos líderes franquistas de Valencia asociaran el término País Valenciano con el de Países Catalanes hizo que la UCD cambiara de opinión en el Congreso de los Diputados y quisiera recuperar el nombre de Reino de Valencia, modificando lo que habían acordado en Benicàssim, aprovechando la mayoría absoluta que tenían a nivel nacional. Ante el ridículo y la imposibilidad de oficializar tan anacrónica nomenclatura, el diputado ucedista valenciano Emilio Attard propuso el aséptico nombre de Comunidad Valenciana, que fue el finalmente escogido, aunque incluyendo los términos País Valenciano y antiguo Reino de Valencia en diversos artículos del Estatuto, dejando libertad a la Generalitat Valenciana para usar la nomenclatura que prefiriese en cada momento.

Años de luchas y debates que no llevaban a ninguna parte se sucedieron en el seno de la sociedad valenciana, aunque poco a poco el nombre de Comunidad Valenciana se iba popularizando, especialmente tras las campañas turísticas que la Generalitat Valenciana lanzó con el lema de “Comunidad Valenciana, vacaciones todo el año”.

EL DEBATE EN LA ACTUALIDAD

Aún actualmente, tal y como ha demostrado el PPCV con su proposición no de ley, el tema de la nomenclatura del territorio valenciano sigue levantando ampollas. Para muchos, el término País Valenciano está asociado a posturas independentistas. Sin embargo, para otros esta asociación es totalmente errónea. Argumentan diciendo que la definición de la Real Academia Española dice que “país” es una nación, región, provincia o territorio. Con lo cual es perfectamente válido utilizar el término País Valenciano. Por otro lado, explican que diversos territorios son llamados países sin que esto se asocie a Estado o a movimientos independentistas, como por ejemplo el País de Gales, el País Vasco o el País del Loira.

Por otro lado, el término Antiguo Reino de Valencia es cada vez menos usado por causas obvias. No hay monarca en Valencia desde hace casi 300 años por lo que a muchos les resulta anacrónico dicho nombre.  Si miramos a la historia, el último Rey en jurar los Fueros del Reino de Valencia fue Carlos III de Austria. Sin embargo, algunos pocos valencianos argumentan que los Borbones, a pesar de los Decretos de Nueva Planta, siguieron utilizando el título de Rey de Valencia, incluyendo al actual Rey Don Juan Carlos I.

Otros términos con los que se denominó a las tierras valencianas desde el exterior fueron Región de Valencia o incluso, Levante español, términos residuales en su uso por los valencianos y que se asocian a los sectores más conservadores del franquismo. Es por esto que dichas denominaciones nunca han tenido un carácter oficial y ni siquiera presencia legal.

Lo cierto es que la reapertura de este tipo de debates en las Cortes Valencianas es algo especialmente triste en la encrucijada histórica actual, con las arcas de la Generalitat Valenciana vacías, el desafío soberanista catalán o la imperiosa necesidad de reformular un nuevo modelo de financiación que se adecúe  a las nuevas necesidades del pueblo valenciano.

Tal vez la mejor solución sea volver a la libertad anterior a mayo, cuando el debate estaba extinguido y cada cuál podía referirse a las tierras valencianas como Comunidad Valenciana o País Valenciano indistintamente, siguiendo modelos como el del País Vasco – Euskadi.

Enric-Sol Brines Gómez